El procedimiento para la elaboración de planes de medidas organizativas y técnicas para el ahorro de energía eléctrica.
Para garantizar el uso racional y económico de la energía en la producción, las empresas desarrollan anualmente planes de medidas organizativas y técnicas para la reducción promedio. niveles específicos de consumo de electricidad.
Estos planes contemplan medidas concretas para reducir el consumo de energía mediante la mejora de los procesos productivos, la introducción de nuevas tecnologías, el aumento de la productividad de los equipos existentes, la mejora de los métodos de producción y de trabajo, y la automatización.
La tarea principal de desarrollar e implementar medidas para ahorrar energía es la eliminación o reducción drástica de las pérdidas de energía eléctrica en las instalaciones de los consumidores.
Las pérdidas de energía deben dividirse en pérdidas irreparables (o pérdidas cuya eliminación no está económicamente justificada) y pérdidas cuya eliminación en las condiciones técnicas dadas es posible y económicamente factible.
Las pérdidas energéticas fatales son eléctricas (en equipos y redes), mecánicas (en máquinas herramienta y transmisiones), pérdidas de presión en tuberías, pérdidas de calor en equipos y redes de calefacción, etc.
Pérdida de electricidad, cuya eliminación es posible y económicamente factible, se puede dividir en:
a) pérdidas causadas por una operación insatisfactoria de equipos y redes de ingeniería;
b) pérdidas causadas por defectos de diseño en el equipo, elección incorrecta del modo tecnológico de operación, retraso en el desarrollo de redes de ingeniería, etc.
Las pérdidas causadas por la operación insatisfactoria de equipos y redes de servicios incluyen:
1. Uso irracional de las instalaciones de alumbrado.
2. Fugas de aire comprimido, agua de servicio, oxígeno, fluidos de proceso y gases por mal estado de tuberías, válvulas de conexión y cierre.
3. Pérdidas excesivas de calor debido al aislamiento térmico deficiente de los hornos eléctricos, pérdidas por radiación a través de las ventanas abiertas de los hornos de fusión y hornos de tratamiento térmico, inactividad de los hornos térmicos.
4. Carga incompleta de equipos tecnológicos, paradas no planificadas, mal funcionamiento de los equipos, perturbaciones tecnológicas que provocan ralentí y uso irracional de las unidades, falta de diagramas de flujo que determinen el funcionamiento óptimo de los equipos, mala organización de los lugares de trabajo.
5. Pérdidas excesivas de energía eléctrica en equipos y redes eléctricas: presencia de motores eléctricos sobredimensionados, funcionamiento al ralentí de transformadores de soldadura, equipos tecnológicos, falta o insuficiencia compensación de potencia reactiva, operación de transformadores de red durante los fines de semana y horas de carga nocturna.
Las pérdidas causadas por defectos de diseño en el equipo, la elección incorrecta del modo tecnológico de operación, el retraso en el desarrollo de las redes de ingeniería, la falta de uso de las últimas tecnologías y equipos modernos incluyen lo siguiente.
1. irracional explotación instalaciones de compresores.
2. Operación irracional de acero de arco eléctrico y hornos de inducción.
3. La presencia de grandes espacios en blanco, lo que conduce a un aumento en el volumen de procesamiento mecánico, procesamiento de piezas de tamaño pequeño en grandes máquinas únicas, uso insuficiente de compuestos de moldeo de plástico (reducción drástica de espacios en blanco), producción insuficiente de piezas forjadas en troqueles en condiciones de volumen, falta de equipos para fundición de precisión, extrusión en frío, etc.
4. Sistema de suministro de agua imperfecto.
5. Operación de equipos tecnológicos y eléctricos con aumento de pérdidas o reducción de productividad.
Al desarrollar un plan de medidas organizativas y técnicas para ahorrar recursos energéticos, las medidas para eliminar y reducir las pérdidas de energía deben dividirse en:
a) medidas organizativas realizadas sin costes adicionales. Por ejemplo, limpieza de aberturas de ventanas, mantenimiento de horarios de encendido y apagado de luces, eliminación de fugas de aire comprimido, hogares, carga completa de hornos eléctricos, etc.;
b) actividades bajo el orden actual, realizadas a expensas de la empresa o préstamos bancarios.Por ejemplo, reparación y modernización de equipos, restauración o reconstrucción de aislamiento térmico de hornos eléctricos, introducción de automatización para control de procesos o unidades tecnológicas, reconstrucción de redes de ingeniería (reemplazo de válvulas, aumento de secciones de tubería, instalación de enfriadores para el circulante sistema de abastecimiento de agua, etc.);
c) medidas de la orden de reconstrucción.
La elaboración, desarrollo e implementación de planes de medidas organizativas y técnicas de ahorro energético tienen una gran importancia organizativa, son formas necesarias de aprovechamiento sistemático y eficaz de los costes no productivos y de ahorro en cualquier producción.
En la elaboración de planes de medidas organizativas y técnicas, deben participar no solo los empleados de los servicios de energía, sino también los jefes de talleres, secciones, tecnólogos, mecánicos, economistas y trabajadores avanzados.
El plan de medidas organizativas y técnicas debe incluir medidas para el consumo racional de energía; introducción de procesos y equipos tecnológicos más avanzados que requieran menores consumos energéticos específicos; combatir las pérdidas de energía en todas las partes del consumo de energía de la empresa.
Para cada actividad incluida en el plan, es necesario determinar su eficiencia económica.
Para analizar los resultados del uso de electricidad para el período del informe y los niveles específicos de consumo de electricidad establecidos por la empresa, es importante preparar correctamente informes sobre la implementación de medidas organizativas y técnicas.
Al preparar planes para medidas organizativas y técnicas, es necesario tener en cuenta los siguientes conceptos.
1.Ahorro de energía anual convencional: el efecto económico en knlovat-hora que se puede lograr en un año, siempre que se utilicen todas las medidas previstas en el plan.
2. Ahorro de energía real resultante de las medidas tomadas en este trimestre o para otro período de informe posterior a la implementación de las medidas.
3. Ahorros energéticos obtenidos en este trimestre por actividades realizadas en trimestres anteriores. Si las medidas no se implementan completamente, en los informes del trimestre es necesario indicar los ahorros anuales condicionales correspondientes al volumen de trabajo realmente realizado.
Se puede calcular una determinación más precisa de la energía real ahorrada a partir de los dispositivos de medición. En el caso de que una instalación o un taller o una unidad separada no tenga contabilidad independiente, los ahorros resultantes se determinan por cálculo en función del cronograma de implementación de las medidas y el volumen real de trabajo realizado.
Para medidas de carácter puramente rutinario, por ejemplo, mantener el modo óptimo de funcionamiento del equipo, organizar un seguimiento sistemático del estado técnico del equipo, aplicar medidas y modos progresivos, el ahorro anual condicionado corresponderá al real alcanzado durante el ciclo mensual de informes. Al mismo tiempo, el ahorro energético se consigue únicamente durante el periodo de funcionamiento de los factores de trabajo y se detendrá en ausencia de intervención del personal operativo o de servicio de turno.